sábado, 24 de diciembre de 2022

¡Feliz Navidad de parte de La Meseta de Miral!

 


    A pesar de que las complicaciones del día a día me están suponiendo un verdadero problema para ponerme frente al pc y que un año más se va por el sumidero mi intención de acabar la segunda parte de esta entrada, no podía dejar pasar mi tradicional felicitación navideña.


    Este belén, que todos los años pongo aquí (salvo uno que no pude montarlo), es en realidad el belén de casa de mis padres. Completado poco a poco durante muchas navidades, es importante destacar que la mayoría de edificios están hechos a mano. Vale, si, en última instancia, todos lo están, pero creo que se entiende. Veréis, este belén, como muchas otras cosas, tiene su historia:


    Cuando mis padres se casaron, hace ya más de 35 años, tenían el misterio, los reyes magos, un pastor y ya. Poco a poco fue completándose, pero hacía falta algo más, una escenografía que sirviera de marco para el mismo. Si en algo destacamos en mi familia, es en ser muy mañosos y manitas (mi hermana no tanto, pero en cambio tiene un talento para la cocina que ríete tu de Chicote), y mi padre se uso manos a ala obra para restaurar un poco el viejo belén. Empezó con los árboles, que no son sino matojos y ramilletes de tomillo salvaje y que como habréis visto dan el pego perfectamente como olivos, muy propios de Palestina. Las montañas, durante muchos años estaban hechas de escoria, fácil de obtener, pues la caldera del edificio era de carbón y les daba a los montes un aspecto muy original. Sin embargo cuando se instaló la caldera de gas, nos quedamos sin el suministro de escoria y decidimos pasarnos al viejo y confiable corcho. No solo pesa mucho menos, lo que es mas práctico para montarlo y guardarlo, sino que además la escoria mancha, y mucho.

    Para los principales edificios, utilizó tizas rectangulares, que pegó con una mezcla de pegamento de contacto y cola blanca y a las que talló la forma de los ladrillos y después pintó y barnizó en un tono amarillento. Finalmente, la posada está hecha con láminas de corcho y el portal tiene una estructura de cartón duro para encuadernar (una de sus aficiones), madera de balsa y cola. Hay que destacar que todos los edificios, castillo de Herodes y choza de los pastores incluidos, fueron pensados para ponerles luces, pero un tonto accidente nos dejó sin ellas hace unos cuantos años. Básicamente, al cambiarlo de lugar (antes se ponía sobre la mesa del despacho) quise rehacer las conexiones para ajustarlos a la nueva disposición de los edificios. Torpe de mi, conecte las bombillas en paralelo en lugar de en serie, estallando todas y chamuscando un pelín la choza de los pastores al enchufarlas. Gracias a Dios, no hubo nada que lamentar más allá del susto. Ya he comentado con mi padre que el próximo año hay que volver a ponerle luces sin más falta, que ya son muchos años desde mi metedura de pata. Según mi novia, es porque no recé correctamente la letanía al Omnissiah. No lo descartemos. En cuanto al resto de edificios y también varias figuras, tienen un origen mucho más normal. Fruto de viajes (como la mezquita Koutoubia de arcilla del fondo, traída de Marrakech) o de herencias de belenes de familiares tristemente ya fallecidos (como los edificios con cúpula o varios pastores y figuras) o por costumbre de cuando éramos niños (como el soldado de Herodes reclutado de entre los primos de Goliath o el alce que se pasea por las montañas)

    En todo caso, desde hace ya casi dos décadas, yo soy el encargado de poner el belén, en lo que tengo libertad casi absoluta, pues hay varias cosas a las que debo atenerme si o si:

-Hay que poner el lago con el pescador.
-Hay que hacer una huerta con melones.
-Los pastores han de tener una cueva.





    Y esta es la historia de este belén. El último año que lo voy a montar como el de mi casa, pues en pocos meses me toca pasar por el altar. Que ya iba siendo hora.




    ¡Os deseo una muy feliz Navidad a todos! Y que El Emperador os colme de bendiciones y buenas tiradas para este 2023


    Lucas 2,14: «Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz a los que gozan de su buena voluntad.»


    Barahair

1 comentario: