jueves, 15 de enero de 2015

Rock & Games de Rivas: Conclusiones (Ojo, tocho a la vista, Parte I)

    Buenas noches a todos (y feliz año nuevo). Por fin, tras varias semanas (casi dos meses de hecho) me pongo a redactar definitivamente esta entrada. Y digo definitivamente porque este ha sido el séptimo y definitivo intento, ya que las otras seis veces me acababa poniendo de mala leche y dejando la entrada sin redactar... No me comprensa digerir bilis por causa de ciertos elementos. 



     En si misma, esta entrada sabia que iba a tardar en publicarla. La razón de ello es que justo despues del Rock & Games, teniamos nuestro IV Torneo Gordo Xenos, al que como novedad teniamos varios invitados desde Plasencia, así que las entradas, y casi toda la actividad del blog y el grupo de whatsapp fueron orientadas hacia ese evento. Despues se nos echaron encima las navidades y francamente, lo último de lo que tenia ganas era de amargarme las fiestas rememorando tan desastrosa jornada. Además, en el blog del Gordo Xenos hay un cierto orden de publicación de entradas (y tambien un cierto placer en pisarnos el orden de publicación unos a otros, chinchándonos los redactores de buen rollo... Roockie, sabes que me refiero a ti), lo que ha ayudado a mi retraso en esta entrada. Puesto que tengo varias entradas de Guerra en color! en mente, así como un mini reportaje de la inauguración de la exposición del CNP, he decidido coger al toro por los cuernos y quitarme de encima esto cuanto antes mejor. (Además de que varios me insisten en leer la entrada y saber con más detalle todo lo ocurrido).


   
     El torneo en si mismo, ya apuntaba maneras desde varios dias antes. A la practicamente nula información de las bases (he de reconocer en cambio que supieron anunciarse de forma excelente en todo tipo de blogs, foros y webs), se unia que casi habia que sacarles los detalles con sacacorchos. Roockie mismo tuvo que mandarles varios emails hasta lograr saber si se permitian aliados, tropas de FW (cuantas, en este caso), suplementos, datasleets, miniaturas clonadas, la cuestión del pintado... Basicamente lo único que se sabia eran los puntos, el sistema de juego y, lo que sería el rasgo más atractivo a la hora de competir, que iba a ser 100% vórtice de guerra, lo que suponia una novedad, el primer torneo hasta ahora que solo contasen las misiones. Además, si aniquilabas al contrincante, se te permitia jugar el resto de turnos (si daba tiempo a ello) para completar el mayor número de misiones posible. (Aquí tambien hubo que preguntar si las misiones imposibles de hacer se descartaban o no). Cuando por fín logramos tener una idea aproximada de las bases y nuestras listas preparadas, llegó la primera dificultad. Mi lista, mandada in extremis por un problema de última hora de disponibilidad de tropas, no parecia haberles llegado, y una vez logré su respuesta me tiré cerca de una semana pidiendoles la cuenta donde debía realizar el ingreso para poder participar en el torneo y de hecho no fué hasta que mandaron un recordatorio a todos los participantes que pude tener dicha cuenta. (Lo cual demuestra que ni se molestaron en leer mi primer email de forma completa ya que en el les pedia que mandase la cuenta). Tras pagar y mandar el justificante del recibo, me tiré otros dos dias pidiendo que me mandasen la entrada, sin la cual en teoria no podría acceder al recinto. (A dia de hoy, sigo esperando que me la envien, por cierto). Afortunadamente hice una foto al mismo y lo llevé encima, así como una copia del email que les mandé con el recibo en mi movil... Con todos estos precedentes me dirigí al lugar del torneo pensado (ingenuo de mi) que sencillamente estarian desbordados, al celebrarse simultaneamente un torneo de warhammer fantasy, otro de infinity y un certamen de rock, así como algunos stands de tiendas y que tal descontrol no era sino fruto de que se les había ido todo un poco de las manos.

El tablero con la escenografía de las torres Kio de Madrid, todo un espectáculo para la vista y que además tuve la suerte de ver como se montaba paso a paso al hacerse estas en el antiguo GW Don Ramón, enfrente de mi antiguo colegio, estaba de exposición junto a una ejército de ultramarines y otro de orkos

    Diluviando y charlando con un participante del torneo de infinity llegué al local, "La Casa + Grande", donde ya asistieron varios miembros del Gordo Xenos a un torneo benéfico. Rozando el límite de tiempo por un problema del metro llegué justo para la explicación de las mesas y misiones, con el consiguiente cachondeo de Roockie y Er Dudu que me preguntaban, no sin razón, si algún día podria llegar a un torneo sin que se me pegasen las sábanas. Tras el reparto de mesas había algo que me escamaba... Bingo, no me habian nombrado ni emparejado con nadie. Un poco preocupado de haber hecho el viaje (y el ingreso) en balde me acerqué a preguntar que sucedía y me dijerón que había sido todo un pequeño error que no se acordaban de mi nombre al hacer las parejas (¿¿??), pero afortunadamente uno de los jugadores era un reservista de la organización, así que ocupé su lugar sin más problemas. En fin, comenzaba lo que pensaba iba a ser una jornada divertida... Bueno, la verdad es que lo fué bastante, al menos en la primera mitad, lo dantesco llegaría al final, pero no adelantemos acontecimientos.

    Mi primera partida fué con un chico jovencito que llevaba Guardia Imperial Astra Militarum aliada con Tropas de Asalto Tempestus Scions, algo inexperto... Tan inexperto que ni habia traido metro, dados, plantilla, reglamento o cartas de vórtice. Afortunadamente si que se trajo el codex de Guardia Imperial Astra Militarum y el de Tropas de Asalto Tempuestum Scions. Al respecto de como funcionaban las reglas de vórtice, le explique rapidamente en que consistian y lo que hicimos fue usar mi reglamento para que anotase sus misiones. Su lista era muy interesante, muy apta para vórtice (en realidad para casi cualquier cosa), con 3 unidades de veteranos, otras 3 de tempestus, una vendetta, un par de hellhounds, un basilisk y un medusa, así como un grupo de ratlings. Empezó pegando duro a mis exploradores... muy duro y muy, pero que muy lento (el torneo en si mismo empezaba a las 10, a las 11 todavia estaba terminando su turno 1... ¡y empezaba el!)... Era desesprante, entre otras cosas porque yo llevaba una lista con tropas muy moviles para hacer ataques quirúrgicos muy precisos y el se planteaba sus siguientes acciones al comienzo de su siguiente turno. A duras penas y con el árbitro metiendome prisa pude terminar la partida en mi turno tres, con una amplia victoria sobre mi rival (me tocaron unos objetivos muy buenos para mi lista, así como rompelineas y señor de la guerra, quedándome x muy poco fuera de conseguir el de Dominación) La verdad es que yo estaba que me subia por las paredes con este chico, pero por lo desesperadamente lento que era. A su favor, no obstante, fué un rival digno, deportivo y que sabía muy bien lo que  jugaba (otra cosa era la misión, claro). Tuvo un momento "urraco" y es que justo tras acabar mis disparos cai en la cuenta de que no habia hecho una tirada de "nunca muere" de mi vindicator (acababa de declarar una carga, pero no habia llegado a tirar su fuego defensivo y además estaba en el otro extremo del tablero). Le pregunté si me dejaba hacerlo y me dijo de forma algo brusca que no, que estábamos en un torneo y que tenia que prestar más atención. Como razón no le faltaba me aguanté... Bueno, pues al terminar ese mismo turno me dijo que sentía haberme dado una respuesta tan borde y que si quería hacer la tirada, que se había calentado un poco con la emoción y porque le estaba barriendo sus tanques. Por supuesto le dije que no pasaba nada, que no tenía porque disculparse y que no iba a hacer la tirada (total, ya a esas alturas), pero que era todo un detalle por su parte. Como conclusión, me pareció que esa misma partida, de haber jugado algo más deprisa, habría sido mucho más disfrutable, ganase quien ganase... A pesar de lo cual, y viendola en retrospectiva, la disfrute bastante.


    En la segunda partida me tocó enfrentarme a un jugador Tau, que además resultó ser amigo de mi primer rival (cosa que descubrí cuando me estaba quejando sobre como jugaba de lento... metepatas que soy). En todo caso el mismo me dijo que es que era algo novato al respecto y ahí lo dejamos. Tras una distribución absurda de los objetivos (crei que desplegabamos a lo ancho, solo que mi concepto de "ancho" era el largo de la mesa, pues la escenografia llaba un poco a error) empezamos. Mi contrincante se ofreció a redesplegar los objetivos, pero ya habíamos perdido algo de tiempo con la explicación de los preparativos pues el tampoco tenia reglamento, ni cartas de objetivos... En fin, tenia cierta lógica si habían venido juntos sin saber muy bien las bases del torneo, lo cual redundaba en lo que antes he explicado, la nula información al respecto por parte de la organización. Como buen jugador tau, y para evitar al menos un par de turnos los disparos de mi vindicator, desplegó su principal potencia de fuego apelotonada en una esquina y controlando con su armadura cataclismo y unos kroots uno de los objetivos, mientras que las apocalipsis hacían lo tanto con otro y, alejados del grueso del ejército algunas unidades rápidas (un piraña, unas armaduras miméticas y un mantarraya con 12 guerreros del fuego) hacían lo propio con otros dos, dejando un objetivo en mi zona de despliegue y otro en tierra de nadie. Afortunadamente esto me benefició pues en el primer turno lancé 3 unidades muy potentes en cápsulas (3 centuriones con cañón gravítico, lanzamisiles y giroscopio con un inquisidor psiquico con invisibilidad, una escuadra de mando con 4 rifles de fusión, un lanzallamas y un bibliotecario de nivel 2 con auspex, oscurecido y aterrorizar y un dreadnought venerable con lanzallamas pesado y cañón de fusión), arrinconándole en su zona de despliegue durante prácticamente toda la partida, mientras mis motos terminaban de cerrar el cerco. Pero como no hay plan que resista el contacto con el enemigo, sus tropas resistieron practicamente todos los embates de mis astartes, no perdiendo prácticamente tropas en el proceso. Con su segundo turno a medias de terminar, sonó la campana para ir a comer, cosa que agradecí en el alma, pues acababa de pasar un turno en que no fallo absolutamente ninguna tirada de salvación, bien por cobertura, bien por armadura o por invulnerable, situación no solo bastante desesperante teniendo en cuenta mi potencia de fuego, sino que dejaba a mis tropas de vanguardia totalmente vendidas y a merced del que posiblemente sea el más temido de los ejércitos de warhammer 40.000 en disparo a corto alcance. (De hecho la única herida que le colé hasta el descanso a su cataclismo fue una sobrecarga de su reactor, y eso que le disparé con los cañones gravíticos y dos gritos psíquicos). Al igual que en el torneo, dejo a quí la primera parte. Como se puede ver hasta aquí, pese a los problemas de organización y mi incipiente desesperación frente a los dados el torneo fluía de forma agradable, o al menos, entretenida. Y así fue, como digo, lo gordo vino después...

(Continuará)

2 comentarios:

  1. VOLVEMOS EN... 7MIN! xP

    Es un tocho, pero se hace ameno de lee: ¡A la espera de la siguiente parte! :)

    ResponderEliminar
  2. Jajajajajaja
    Jooo como te has cortado....
    Y la de saltitos y hostias que dabas ese dia... ainsss
    a la espera de la segunda parte :D

    ResponderEliminar